15.6.13

Me gustaría plasmar en palabras este sentimiento, como siempre se me es dicho –u obligado- hacer. La cuestión es que te quiero y mucho pero, maldito ‘pero’, no se siente como debería. No se me retuercen las entrañas con la inquietud de verte, no se precipita líquido nervioso por la boca de mi estómago al vislumbrarte y la piel no me quema al tocarte.

Creo que lo que más miedo da es que no te importe.